ASPID está llevando a cabo en Lleida la gestión de INVICTES, un programa del Servicio Catalán de Tráfico destinado a facilitar la inclusión de las víctimas de tráfico heridas graves en su entorno social. El objetivo del programa es ofrecer a estas personas, con secuelas para toda la vida, servicios de apoyo y de orientación que favorezcan la autonomía personal y la vida independiente. En cuanto a la demarcación de Lleida, el programa iniciado este enero ya apoya a 9 personas (un 15,3% de las 59 atendidas en todo Cataluña), con un total de 120 horas de trabajo llevadas a cabo. La mayoría de las personas atendidas son hombres, con una franja de edad comprendida entre los 21 y 45 años. Las afectaciones más habituales son lesiones medulares, traumatismos craneoencefálicos, quemaduras severas, amputaciones o politraumatismos.
Bibiana Bendicho, presidenta de ASPID y vicepresidenta de ECOM, ha puesto en valor INVICTES porque “este tipo de sinèrgies entre la Administración pública, que es la que promueve estos proyectos, y las entidades sociales, que son las que dan cobertura a sus socios y prestan los servicios directamente, son muy positivas”. Bendicho ha explicado que el INVICTES era muy necesario puesto que, pasada la fase aguda de hospitalización después de un accidente de tráfico, que sigue un protocolo muy riguroso, “echábamos de menos una continuidad en la atención a la persona afectada, con importantes secuelas, que a menudo se quedaba un poco huérfano por la falta de acompañamiento posterior”. Este acompañamiento es básico “para afrontar el cambio en la vida del accidentado, que además tiene que volver a su entorno familiar y social”.
De su banda, Ramon Lamiel, director del Servicio Catalán del Tráfico, ha dado datos sobre las personas afectadas por accidentes de tráfico en Cataluña. Lamiel ha alertado sobre el incremento progresivo de heridos graves en Cataluña en este ámbito. Así, a la demarcación de Lleida este año han estado 127, el que representa un incremento del 20% respecto al 2022. Lamiel ha explicado que con INVICTES el Servicio Catalán del Tráfico ha pasado de dar únicamente un servicio de información, orientación y atención psicológica a las familias de víctimas mortales de accidentes de tráfico a atender también los heridos graves y sus familias.
Laia Ribas, directora Servicios Autonomía Personal de ASPID, ha aseverado que el proceso de trabajo con las personas atendidas en el marco el programa empieza determinando en qué fase está la persona (hospitalaria o de retorno a su entorno social) y qué necesidades sociales, funcionales y emocionales tiene, y sigue asesorándola sobre cuestiones de tipo laboral, legal y jurídico; ayudándola en el ámbito de la accesibilidad en su entorno próximo (adaptación del hogar); trabajando con grupos de apoyo y personas que han pasado por experiencias similares; buscando las mejores soluciones para la movilidad en el ámbito urbano; asesorando las personas y familias cuidadoras; favoreciendo que el usuario pueda disfrutar de actividades de ocio, de deporte y sociales en general y ayudándolo a integrarse laboral.
Los 8 ámbitos de actuación
Así pues, el trabajo desarrollado en el marco del programa se centra en 8 ámbitos: las acciones de información y orientación (sobre trámites vinculados a la situación de discapacidad y/o dependencia, prestaciones y recursos existentes, asesoramiento financiero); la elaboración de diagnósticos de accesibilidad (básicamente a la vivienda de la persona afectada); los grupos de apoyo y ayuda mutua (para la recuperación emocional, de la la autonomía personal, de las relaciones afectivas y sexuales); el asesoramiento sobre movilidad (transporte público accesible y vehículos de movilidad personal, aprendizaje de las ayudas a la conducción Y el uso de las adaptaciones); el acompañamiento a las personas cuidadoras; las actividad de ocio, cultura y deportes; la orientación e inserción laboral; la participación en la vida social y asociativa y en campañas de concienciación.
Finalmente, Andreu Sánchez, persona con discapacidad como resultado de un accidente de tráfico, ha explicado su experiencia, “un proceso traumático que rompió todo mi proyecto de vida”. Sánchez ha incidido en la importancia de un programa como INVICTES puesto que, una vez dejada atrás la etapa hospitalaria, “entras en un periodo de incertidumbre y angustia, en mi caso porque voces que una parte neurológica no está funcionando”. El testigo ha explicado los problemas con los que se encontró, como la dificultad para subir a su vivienda (situado en un segunda planta), la pérdida del trabajo, la convivencia diaria con la familia o simplemente la incapacidad de leer un libro. Sánchez ha aprovechado su experiencia para ayudar y acompañar otras persones víctimas de accidentes de tráfico.
El equipo técnico de trabajo de ASPID está formado por una trabajadora social, una terapeuta ocupacional y una psicóloga.
Bibiana Bendicho, presidenta de ASPID y vicepresidenta de ECOM, ha puesto en valor INVICTES porque “este tipo de sinèrgies entre la Administración pública, que es la que promueve estos proyectos, y las entidades sociales, que son las que dan cobertura a sus socios y prestan los servicios directamente, son muy positivas”. Bendicho ha explicado que el INVICTES era muy necesario puesto que, pasada la fase aguda de hospitalización después de un accidente de tráfico, que sigue un protocolo muy riguroso, “echábamos de menos una continuidad en la atención a la persona afectada, con importantes secuelas, que a menudo se quedaba un poco huérfano por la falta de acompañamiento posterior”. Este acompañamiento es básico “para afrontar el cambio en la vida del accidentado, que además tiene que volver a su entorno familiar y social”.
De su banda, Ramon Lamiel, director del Servicio Catalán del Tráfico, ha dado datos sobre las personas afectadas por accidentes de tráfico en Cataluña. Lamiel ha alertado sobre el incremento progresivo de heridos graves en Cataluña en este ámbito. Así, a la demarcación de Lleida este año han estado 127, el que representa un incremento del 20% respecto al 2022. Lamiel ha explicado que con INVICTES el Servicio Catalán del Tráfico ha pasado de dar únicamente un servicio de información, orientación y atención psicológica a las familias de víctimas mortales de accidentes de tráfico a atender también los heridos graves y sus familias.
Laia Ribas, directora Servicios Autonomía Personal de ASPID, ha aseverado que el proceso de trabajo con las personas atendidas en el marco el programa empieza determinando en qué fase está la persona (hospitalaria o de retorno a su entorno social) y qué necesidades sociales, funcionales y emocionales tiene, y sigue asesorándola sobre cuestiones de tipo laboral, legal y jurídico; ayudándola en el ámbito de la accesibilidad en su entorno próximo (adaptación del hogar); trabajando con grupos de apoyo y personas que han pasado por experiencias similares; buscando las mejores soluciones para la movilidad en el ámbito urbano; asesorando las personas y familias cuidadoras; favoreciendo que el usuario pueda disfrutar de actividades de ocio, de deporte y sociales en general y ayudándolo a integrarse laboral.
Los 8 ámbitos de actuación
Así pues, el trabajo desarrollado en el marco del programa se centra en 8 ámbitos: las acciones de información y orientación (sobre trámites vinculados a la situación de discapacidad y/o dependencia, prestaciones y recursos existentes, asesoramiento financiero); la elaboración de diagnósticos de accesibilidad (básicamente a la vivienda de la persona afectada); los grupos de apoyo y ayuda mutua (para la recuperación emocional, de la la autonomía personal, de las relaciones afectivas y sexuales); el asesoramiento sobre movilidad (transporte público accesible y vehículos de movilidad personal, aprendizaje de las ayudas a la conducción Y el uso de las adaptaciones); el acompañamiento a las personas cuidadoras; las actividad de ocio, cultura y deportes; la orientación e inserción laboral; la participación en la vida social y asociativa y en campañas de concienciación.
Finalmente, Andreu Sánchez, persona con discapacidad como resultado de un accidente de tráfico, ha explicado su experiencia, “un proceso traumático que rompió todo mi proyecto de vida”. Sánchez ha incidido en la importancia de un programa como INVICTES puesto que, una vez dejada atrás la etapa hospitalaria, “entras en un periodo de incertidumbre y angustia, en mi caso porque voces que una parte neurológica no está funcionando”. El testigo ha explicado los problemas con los que se encontró, como la dificultad para subir a su vivienda (situado en un segunda planta), la pérdida del trabajo, la convivencia diaria con la familia o simplemente la incapacidad de leer un libro. Sánchez ha aprovechado su experiencia para ayudar y acompañar otras persones víctimas de accidentes de tráfico.
El equipo técnico de trabajo de ASPID está formado por una trabajadora social, una terapeuta ocupacional y una psicóloga.